La tarea del signo identificatorio no es fácil. Todos los días debe llamar la atención, seducir e informar. Su síntesis y pregnancia son decisivas para no pasar desapercibido y competir no solo con sus adversarios de actividad, sino con la inmensa vorágine de marcas que pululan en un mercado globalizado y agresivo. Hemos intentado siempre que el diseño de éstos estímulos visuales, símbolos, logotipos y pictogramas fueran registrados por la gente, identificando empresas, productos y señales.