Este libro analiza la relevancia de los principales factores de la salud del suelo y su influencia en la sostenibilidad y productividad de los agrosistemas. A lo largo de toda la historia de la agricultura, la salud y la calidad del suelo se ha visto deteriorada por la práctica de técnicas de cultivo que han dado lugar a la erosión, compactación y contaminación del suelo, la pérdida de materia orgánica entre otros aspectos, dando lugar a casos extremos de pérdida irreversible de los suelos para su cultivo o bien al deterioro progresivo de su fertilidad; implicando la necesidad de incrementar los inputs para mantener la productividad.